Para
nadie es un secreto el gran fervor religioso que siente el pueblo
margariteño por santos como San Nicolás de Bari, el santo Patrón de
Porlamar.
Pero ¿quién fue San Nicolás de Bari y porqué es el Patrono de Porlamar?. Ante tales preguntas habría que decir que él fue un hombre que nació alrededor del año 270 D.C en Patara (Turquía) de familia y adinerada fue criado bajo la fe cristiana, sus padres al morir le heredaron una gran fortuna, la cual repartió entre los pobres, debido a que era conocido por su carácter piadoso y generoso. Luego emigró a Europa para iniciar una memorable, transparente y ejemplar labor católica como sacerdote que le hizo famoso tanto en el viejo mundo como el nuevo mundo en donde varios siglos después se convirtió en la fuente de inspiración del tal esperado San Nicolás de nuestras tradiciones navideñas, porque durante su vejez viajó evangelizando y entregando juguetes a los niños con el motivo de recordar el significado de la navidad.
Muere el 6 de diciembre del año 345 en Myra pero sus restos son trasladados en la ciudad italiana de Bari.
En cuanto al porqué San Nicolás de Bari es patrono en tierras margariteñas tiene su origen en una antigua leyenda:
Ella afirma que la imagen del San Nicolás llegó a Porlamar con el naufragio de un barco cuyos navegantes eran de la ciudad italiana de Bari, quienes en son de agradecimiento a la tierra que los salvo, decidieron dejar a su santo para que le brindara protección a los marineros, a los comerciantes, los prisioneros y los enfermos de la isla de Margarita en donde en 1676 fue declarado Patrono de Porlamar.
Reseña Histórica de la Basílica de Porlamar: La primitiva iglesia de Porlamar fue destruida por piratas franceses en el año 1.555, quienes la quemaron y se llevaron las campanas y los ornamentos. Para el año de 1.833 venía sirviendo de Iglesia de Porlamar una casa construida por el Sr. Vicente Rodríguez ubicada en la calle Guevara. En el año 1.853 empiezan la construcción de un nuevo Templo (ubicado en lo que es hoy en día el Bulevar Guevara), gracias a la iniciativa del Gobernador; General Francisco Esteban Gómez, que al ver la necesidad de levantar un nuevo Templo, pide la colaboración monetaria del pueblo de Porlamar, es así como se inician los trabajos de construcción de la IglesiaSan Nicolás de Bari, cuyo nombre es en honor al patrono de Porlamar. Para el año de 1.860 la iglesia San Nicolás de Bari todavía estaba sin terminar; pero cuatro años más tarde se dio al culto, realizándose la bendición el día 8 de Diciembre de 1.864. El 5 de Diciembre de 1.897 se forma una junta presidida por el Dr. Luis Hortega; con el fin de recaudar fondos para la continuación de los trabajos de construcción y remodelación del Templo, pues materialmente, la iglesia se estaba cayendo en pedazos. En 1.901 comenzó la reconstrucción de las torres del templo, y solo fue hasta el 21 de Septiembre de 1.906 cuando se celebró la primera misa en el nuevo templo. Las campanas de bronce ubicadas en las torres de la iglesia fueron adquiridas entre los años de 1.909 y 1.911. El reloj colocado en la torre sur, fue costeado por la comunidad Siria radicada en Porlamar y se estrenó en 1.914. El 12 de Julio de 1.922, se estableció en esta ciudad la Misión Carmelita, presidida por el sacerdote Reverendo Fray Elías María Sendra; con el cual reinician con gran empuje los trabajos del templo, donde se concibe el proyecto de una gran Basílica para esta ciudad.
Descripción General: El Templo fue concebido en un estilo neogotico, donde se destacan ojivales y un acceso principal con dos ventanas pequeñas de lado izquierdo siguiendo la misma descripción, dos torres una cada lado de la iglesia; de tres cuerpos, una es campanario y la otra reloj. Su interior se desarrolla en un volumen con planta de cruz. La parte superior la iglesia posee una cuenta con un coro, tiene tres naves; una central y dos laterales, posee también una galería de columnas que sostienen arcos ojivales con nervaduras prominentes, con accesos laterales a cada lado.
Cada año se efectúan misas y procesiones del Santo Patrón de Porlamar, y cada 6 de Diciembre está decretado como “día de júbilo laborable”.